martes, noviembre 06, 2007

UNA TAREA PROGRAMADA.

El tiempo es el peor enemigo del hombre, son declaraciones de algunas personas en diversas partes del mundo. Porque muchos de ellos quieren alargar el día y añoran tener más de 24 horas. 
Pues consideran que el tiempo que da Dios es insuficiente, para realizar las diferentes actividades que tienen supuestamente planificadas. Para el cristiano es muy importante el tiempo. 

Ya que ello nos permitirá adecuar el trabajo que tenemos realizar cotidianamente con nuestras vidas. Desde luego mostrando a las demás personas el cambio que Dios está haciendo con nosotros. Las manijas del reloj, a muchas personas manejan sus vidas. Por la manera abrupta que han convertido su pobres vidas sujetadas al beneficio y a una clase social cómoda. Claro no estoy en contra de la prosperidad de esas personas. Es alentador que haya personas que busquen la felicidad y ponen empeño en algo material que en resumen superficial y lamentablemente se están olvidando de algo importante. La comunión que debe existir entre las personas y más aún con la familia. El pilar de toda sociedad, una familia bien constituida es el desarrollo de una comunidad, pueblo y nación. Recuerdo una predica que decía que antes de morir el sucesor de más grande líder de Israel me refiero a Moisés. Josué antes de expirar, dijo que no olviden a Dios y esta promesa. “Mi casa y yo serviremos a Jehová”. Esa oración me hizo sentar y reflexionar, sobre la familia que yo quería tener en un futuro cercano. La proximidad de ese hecho, hizo que incomode mi vivencia en este mundo. Porque a veces dejar que las cosas venga por su propia cuenta, decía yo que era de Dios. Pero no todo bien de él. Comprendí que las cosas tenían que ser planificadas y aprovechar el tiempo para una preparación óptima que ayude a los varones y mujeres a desarrollar su conocimiento y el crecimiento espiritual. Así que estimados hermano solamente nos queda aprovechar el tiempo de manera adecuada para nuestros días sean muy hermosos en Dios.

miércoles, octubre 31, 2007

UN AMIGO QUE NUNCA OLVIDAS.



A través de los segundos, minutos, días y años, desde muy niño siempre me ha acompañado, en tristezas y alegrías.

Un amigo que a veces es difícil de describir, pero su amor, su humildad, su paciencia, su bondad y su mansedumbre. Me enseña a ser como él, aunque a veces creo que es difícil ya que nuestra naturaleza nos invita hacer todo lo contrario. Muchas veces nos dicen que tenemos que escuchar recién actuar.

Nosotros hacemos prejuicios antes de conocer del tema o a la persona. Los prejuicios no dejan analizar y buscamos respuestas en lugares equivocados. Pero hay un gran amor que muchos niegan, que hace mucho tiempo ha sido llevado a los hombres.

Estoy hablando del único verbo que existe, que es un amigo especial para mí que siempre aboga por las cosas negativas que hago día a día. Les presentare se llama JESUS, a quien a hace muchos años habían crucificado y que no creían en el amor que de él emanaba.

A pesar del rechazo de los hombres él nunca nos desestimo, además se mostró con nosotros misericordioso y pidió a Dios nuestro padre, que mediante él teníamos una esperanza de salvación y no sufrir el castigo que tiene preparado a las personas que cometen cosas ilícitas que se contemplan en la Biblia.

Algunos preguntan ¿Dónde está él?, Jesús siempre está a tu lado, acompañándote a pesar de que nosotros le damos la espalda. Sólo quiere él que les des una oportunidad, para que pueda hablar contigo. Y veras el cambio que hará en ti, cuando aceptes conversar con Jesús. Además encontraras, la paz que buscas, la unión de tú familia que seguramente está separada.

Bueno te comparto de esta manera el amor de mi amigo Jesús que murió por nuestros pecados, y resucito para salvar a los pecadores como nosotros.

Porque la paga del pecado es muerte, más la dádiva de Dios es vida eterna, en Cristo Jesús señor nuestro. Romanos 6.23

miércoles, julio 25, 2007

DIO SU VIDA


Al final de la primera guerra Mundial, un destacamento de soldados ingleses esperaba entrar en un pequeño pueblo cerca del Rhin (Francia) cuando repentinamente un soldado salió corriendo de un edificio gritando: "¡Alerta!", Instantáneamente una descarga de rifles le dejaron muerto en el suelo.
Pero la advertencia salvó a la compañía de una emboscada. El destacamento luchó haciendo retirar al enemigo y pronto se supo la historia del que les había salvado. Era un soldado de la guardia real irlandesa, prisionero de los alemanes quien conociendo los planes del enemigo esperó el momento oportuno y sacrificó su propia vida para salvar la de muchos compatriotas. Reconocidos y conmovidos los ingleses le dieron una buena sepultura, poniendo sobre ella una cruz con este texto: "A otros salvó, a sí mismo no se pudo salvar".
Estas fueron precisamente las palabras que los judíos lanzaron contra Cristo cuando estaba pendiente de la cruz. No pudo salvar a otros y a sí mismo a la vez, y prefirió sacrificarse él en favor de otros, incluso de aquellos que le crucificaron.
Juan 3.16
De tal manera amó Dios al mundo que ha dado a su Hijo unigénito para que todo aquel que en El cree, no se pierda, sino que tenga vida eterna".
Romanos 5:8
"Pero Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aun pecadores,. Cristo murió por nosotros."
Juan 3:17
Porque no envió Dios á su Hijo al mundo, para que condene al mundo, mas para que el mundo sea salvo por él.